Despiertas un día del letardo de la rutina, te detienes unos segundos a contemplar el atardecer,
A disfrutar de la brisa fresca de la noche, sientes la magia de la vida,
Lo milagroso de cada detalle.
Mágicamente esa noche, ves en esa chica una ninfa de belleza exquisita,
En silencio te pierdes en su mirada dulce hechizante, te deslumbras con su sonrisa llena de pura alegria,
En ese momento la ves tal y como es, esencia pura, la entiendes,
Tu alma empieza a sucumbir, a sentir que está cruzando al umbral de la fantasía a ese país de la utopía.
Te sientes invencible, alegre y al mismo tiempo débil, vulnerable,
Sientes la necesidad de protegerla pues la vez como lo que es una princesa dulce exquisita.
Pierdes toda lógica y sigues la voz de tu corazón que te grita: acércate a ella descifra el encanto de su esencia.
Sabes que después de esta noche no veras la vida de nuevo como antes,
sabes que esa chica que antes era solo eso una chica nada mas, hoy es la ninfa, la princesa que siempre has soñado,
Sabes que es una locura, pero sientes que debes protegerla,
procurar sobre todas las cosas su felicidad, sabes que si ella está bien,
también tú lo estarás.
En ese instante el tiempo se vuelve cómplice y pasa desapercibido tras el manto de la noche,
De esa noche mágica que no quieres ver su final,
no quieres perderte de su dulzura de su ternura de su exquisita belleza.
La ves partir, te despides, pero en tu corazón ella ya se quedo! Y de allí será imposible que se marche!
Te asusta esto que estas sintiendo, pero a la vez te alegras, te sientes fascinado.
Solo queda esperar a verla de nuevo, para seguir sintiendo, esta magia en silencio.
A disfrutar de la brisa fresca de la noche, sientes la magia de la vida,
Lo milagroso de cada detalle.
Mágicamente esa noche, ves en esa chica una ninfa de belleza exquisita,
En silencio te pierdes en su mirada dulce hechizante, te deslumbras con su sonrisa llena de pura alegria,
En ese momento la ves tal y como es, esencia pura, la entiendes,
Tu alma empieza a sucumbir, a sentir que está cruzando al umbral de la fantasía a ese país de la utopía.
Te sientes invencible, alegre y al mismo tiempo débil, vulnerable,
Sientes la necesidad de protegerla pues la vez como lo que es una princesa dulce exquisita.
Pierdes toda lógica y sigues la voz de tu corazón que te grita: acércate a ella descifra el encanto de su esencia.
Sabes que después de esta noche no veras la vida de nuevo como antes,
sabes que esa chica que antes era solo eso una chica nada mas, hoy es la ninfa, la princesa que siempre has soñado,
Sabes que es una locura, pero sientes que debes protegerla,
procurar sobre todas las cosas su felicidad, sabes que si ella está bien,
también tú lo estarás.
En ese instante el tiempo se vuelve cómplice y pasa desapercibido tras el manto de la noche,
De esa noche mágica que no quieres ver su final,
no quieres perderte de su dulzura de su ternura de su exquisita belleza.
La ves partir, te despides, pero en tu corazón ella ya se quedo! Y de allí será imposible que se marche!
Te asusta esto que estas sintiendo, pero a la vez te alegras, te sientes fascinado.
Solo queda esperar a verla de nuevo, para seguir sintiendo, esta magia en silencio.
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